viernes, 31 de diciembre de 2010

El retablo de la Cofradía California - II

            Antes de dar colofón a este trabajo, mostrando el retablo ya restaurado y ensamblado en todo su esplendor, es necesario hacer un inciso referente al proyecto iconográfico del mismo.

            El retablo como tal, es una obra arquitectónica que sirve de marco para una serie de obras escultóricas y pictóricas, que cumplen una función didáctica y catequética. Para dicho fin, estas obras plasman las vidas de Cristo, la Virgen o los Santos.

            En nuestro caso, todo el programa iconográfico del retablo de la Cofradía California, está orientado a resaltar el pasaje del Prendimiento, momento en el que Jesús asume su destino como redentor de los hombres.

            Dos escultores vinculados con sus trabajos a la Cofradía, José Antonio Hernández Navarro y Luis Enrique González Rey, han hecho posible esta aspiración. Iniciaremos el desarrollo del proyecto iconográfico con las obras del primero de estos Maestros.

            Hernández Navarro ejecuta las figuras del ‘Profeta Isaías’ y ‘San Juan Bautista’, situadas a ambos lados de la hornacina del Prendimiento, integradas en dos de las piezas del retablo flanqueadas por dos columnas de exuberante y variada decoración, basada en elementos vegetales y cabezas de querubines.


Profeta Isaías
          


             La figura del Profeta Isaías aparece representada con un libro en la mano izquierda, abrazando con su brazo derecho el árbol de Jesé, atributo que simboliza la genealogía de Cristo.









San Juan Bautista



La imagen de San Juan Bautista la representa portando sobre su mano izquierda un libro, símbolo de los profetas, sobre el que reposa un pequeño cordero, en alusión al Cordero Pascual cuya venida en él se anuncia. Su mano derecha porta una sencilla cruz.


Ambos profetas se sitúan sobre unas piezas donde se encuentran representados San Lucas y San Marcos, como alegoría de los nuevos tiempos contenidos en el Nuevo Testamento.

martes, 28 de diciembre de 2010

Francisco Carrera Iglesias, Maestro bordador.

Francisco Carrera Iglesias, o más conocido en el mundo cofrade como "Paquili", es un diseñador y maestro de trabajos de ajuares cofradieros. Entre sus obras más significadas se encuentran un saya y la toca de sobremanto de los "rombos" de la Esperanza Macarena, o los palios de Nuestra Señora de los Dolores del Cerro y de María Santísima del Rocío de la Hermandad de la Redención. En Zaragoza contamos con uno de sus trabajos, el manto que la Casa de Andalucía regaló a nuestra querida Virgen del Pilar.

Os ofrecemos a continuación la conferencia, con la que deleitó a los asistentes, que realizó sobre el bordado, en la Hermandad de Santa Genoveva. Para más información, podéis consultar su página web en http://www.carreraiglesias.es/


viernes, 24 de diciembre de 2010

El Neogótico en Sevilla - I

Este estilo se desarrolla en la sociedad del siglo XIX, una sociedad romántica, historicista, con un renovado gusto por las formas medievales; es una corriente relacionada con los sentimientos nacionalistas de la sensibilidad de la época. Rechaza el racionalismo neoclasicista y exalta los valores del romanticismo.

De este modo, como uno de los exponentes de esta corriente arquitectónica encontramos el Paso del Cristo del Calvario datado en 1895.


Fotografía de Pasión en Sevilla
http://cofrades.pasionensevilla.tv/profiles/blogs/los-pasos-e-imagenes-3



lunes, 20 de diciembre de 2010

Barroco andaluz - III

Nuestro Padre Jesús de la Pasión, obra excepcional de Martínez Montañés, que procesiona en su altar de plata, nacido de las manos de Cayetano González Gómez. De nuevo este documental, cortesía de José Pablo Cañete González.


sábado, 11 de diciembre de 2010

El retablo de la Cofradía California - I

Cuando en Zaragoza, algunas Hermandades, suspiran por poder tener sus imágenes al culto público en sus sedes canónicas, encontramos otras, que disponen de capillas o  altares propios en los que poder dar culto todo el año a sus Sagrados Titulares.

En algunos casos son de reciente construcción, en otros, con varios siglos de historia, como es el caso que nos ocupa.

No quiero continuar sin agradecer en primer lugar a la Pontificia, Real e Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús en el Doloroso Paso del Prendimiento y Esperanza de la Salvación de las Almas (en adelante Cofradía California) poner a disposición de este medio de difusión cultural y cofrade el material bibliográfico y fotográfico necesario para la redacción de los artículos; a Victoria Botí, que en el momento de la ejecución del retablo era la Mayordomo Presidente de la Comisión de Arte, excelente amiga y cofrade comprometida, que siempre está a nuestra disposición a pesar de la distancia; a Ángel Julio Huertas, en esos momentos Conciliario Secretario de la Comisión de Arte, excepcional persona, con una visión que va más allá de la que nos imponemos en este mundo cofrade y que además nos regaló esa magnífica obra Mater California, que también es base para estos trabajos.

Fundada en 1747, la Cofradía California tuvo presente desde sus inicios la necesidad de un espacio en el que rendir culto a sus Titulares. De este modo y sólo cuatro años más tarde, adquieren unos terrenos para la capilla dedicada a su Titular, el Stmo. Cristo del Prendimiento, en la iglesia de Santa María aprovechando las obras de construcción de la misma. Éstas finalizan en 1760, y se inaugura el primero de febrero de ese mismo año.

La capilla antes de la ejecución del retablo.

Es de planta cuadrada con las esquinas ligeramente achaflanadas, dotándola de un aspecto octogonal. La cúpula descansa sobre un tambor con ocho vanos, que a su vez se sustenta en cuatro pechinas decoradas con el escudo de la Cofradía. En las paredes y chaflanes se abren siete hornacinas con los siguientes grupos escultóricos:
- Grupo escultórico del Prendimiento en la cabecera y a sus pies la Stma. Virgen del Primer Dolor.
- San Juan Evangelista.
- San Pedro Apóstol, ambos en los chaflanes contiguos a la cabecera.
- Parte del grupo escultórico de la Oración del Huerto, en la pared izquierda.
- Parte del grupo escultórico del Ósculo, en la pared derecha.
- Grupo de la conversión de la Samaritana.
- Santísimo Cristo de la Flagelación, estos últimos en los chaflanes opuestos a la cabecera.

El acceso a la capilla se realiza a través de una reja de forja que data de 1762, adornada con motivos alusivos a la Pasión.



miércoles, 8 de diciembre de 2010

Barroco andaluz - II

Nuevo documental de José Pablo Cañete González en el que nos narra sobre la obra del Cristo de los Desamparados, el retablo del Monasterio de San Isidoro del Campo, un  relieve para Jerez y el canasto desgraciadamente desaparecido de Ntro. Padre Jesús de la Pasión realizados por Juan Martínez Montañés.




sábado, 4 de diciembre de 2010

Barroco andaluz - I

Documental realizado por José Pablo Cañete González sobre el Cristo de la Clemencia obra del escultor Juan Martínez Montañés.



domingo, 28 de noviembre de 2010

Artes decorativas

Históricamente se consideran artes plásticas a la escultura, pintura y arquitectura. Pero, para completar el conjunto de un Paso, auténtico Templo que paseamos por las calles de nuestras respectivas localidades en Semana Santa, son necesarias también las artes decorativas.

No entenderíamos como se conformaría un Paso sin sus canastos tallados y dorados, sus cartelas, sin la orfebrería o metalistería de los Palios, sus bordados. También pintura y escultura, no como obra independiente, pero sí dentro de una obra mayor, se engloban en esta definición, encontrando innumerables ejemplos en la producción artística cofrade.

Por lo tanto no solo se hablará aquí de nuestros Sagrados Titulares, sino que también los haremos de todo aquello que los rodea y exorna.

Véase algunos ejemplos: 


Cartela del Paso del Señor de la Sentencia
Hermandad de la Macarena Sevilla.
Fotografía Virginia Jardiel.
Corona de Camarín de
María Santísima de la Victoria
de la Hermandad de Columna y Azotes, Sevilla.
Fotografía Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
Saya y manto de Camarín de
Nuestra Madre y Señora del Patrocinio,
Hermandad de “El Cachorro”, Sevilla.
Fotografía Virginia Jardiel.

sábado, 20 de noviembre de 2010

La imagen de Jesús Nazareno de Zaragoza

ANTECEDENTES HISTÓRICOS E ICONOGRÁFICOS

Jesús Nazareno de Zaragoza, fotografía Jorge Sesé
La imagen de Jesús Nazareno de la ciudad  de Zaragoza corresponde a una advocación de Nuestro Señor Cautivo, Rescatado o de Medinaceli, heredera del Cristo de Medinaceli, que pertenece a la Archicofradía Primaria Nacional de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Madrid. Esta imagen exenta es la iniciadora de una iconografía de Cristo propiamente española, fundamental para entender al Cautivo tal y como lo conocemos hoy en día.

El Cautivo tiene su origen iconográfico en el pasaje bíblico de San Juan[1] en el que Jesús es presentado al pueblo, el “Ecce homo”[2],  flagelado y coronado de espinas. Otros identifican a estos cautivos con el pasaje, también de San Juan[3], en el que Poncio Pilato dice a los judíos, “Aquí tenéis a vuestro rey”[4]. Algunos utilizan esta iconografía pero para representar un pasaje previo al proceso de Jesús, el prendimiento.
                       
Los rasgos comunes de estas tres interpretaciones son las túnicas moradas, que simbolizan la penitencia, además de aparecer maniatado con un cordón, que también le rodea la cintura y el cuello. Los bordados y la corona de espinas de valiosos metales, simbolizan la majestad de Cristo. En los representados en posición de presentación al pueblo también portan mayoritariamente escapulario trinitario cuyo origen histórico desarrollaremos más adelante. En algunos casos, estos Cautivos, forman parte de lo que conocemos como Misterios, y se aparta de la representación exenta, prototipo de esta advocación.

También encontramos excepciones en el color de la túnica como sucede por ejemplo en Ayamonte (Huelva), Brenes (Sevilla), Cómpeta (Málaga), Granada, Las Cabezas de San Juan (Sevilla), Málaga, Martos (Jaén), Mataró (Barcelona) o Valdepeñas (Ciudad Real), entre otros, en los que la imagen es vestida de color blanco, o como sucede en Puente Genil (Córdoba) donde la túnica del Señor es de color grana.

Esta iconografía esta directamente relacionada con el concepto que del Nazareno se tiene en la escuela sevillana que no es otra que la de Jesús portando la cruz camino del Gólgota. A finales del siglo XVI, experimentamos un cambio importante en la imaginería procesional que representa a Jesús Nazareno, especialmente en dicha escuela sevillana. La imagen de bulto redondo, en la que hasta entonces se esculpen también las telas y se policroman, se articula y posibilita que sea vestida con telas y pueda adoptar distintas posiciones[5]. Así de esta forma podemos transformar una imagen originalmente ideada en una posición caminante hacia su martirio, a otra en posición de cautivo para poder realizar los besamanos que hoy día siguen realizándose por toda la geografía española.

Cristo de Medinaceli, fotografía Archidiócesis de Madrid
            Dicho esto y conociendo la historia del Cristo de Medinaceli es más fácil comprender esta singular iconografía, por lo tanto en adelante nos introduciremos en su historia e incluso en la leyenda de esta venerada imagen.

            Durante el reinado de Felipe III y de acuerdo a la política expansionista de la época, se conquistan las plazas de Larache[6] y de Mámora[7] pertenecientes al reino de Fez, que reforzarían la situación de España en el Mediterráneo, el control marítimo, y poder así evitar los ataques piratas en las rutas comerciales.
           
            La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno pertenece a la escuela sevillana, al taller de Juan  Mesa o alguno de sus discípulos. Otros autores relacionan la talla al círculo de Luis de la Peña, los más a Francisco de Ocampo.

            Fue realizada por encargo de los Padres Capuchinos de Sevilla, para ser trasladada a la plaza de Mámora, a la mezquita transformada en templo cristiano regentado por ellos y cubrir las necesidades espirituales de los soldados. En dicho traslado intervinieron directamente el padre franciscano Fray Francisco Guerra y el Obispo de Cádiz, a cuya jurisdicción eclesiástica pertenece esta plaza.
           
El momento que marca la historia y la leyenda de esta venerada imagen fue el 30 de abril de 1681[8], fecha en que Musley Ismael toma la plaza y el Nazareno es trasladado a Mequínez como botín del saqueo de la ciudad. La imagen fue arrastrada y echada a los leones como agravio a la religión cristiana.

            El religioso Trinitario Descalzo Fray Pedro de los Ángeles se encontraba en la ciudad y solicitó el rescate de la imagen como si de una persona se tratara y arriesgando su propia vida lo custodió hasta que se hiciera efectivo el rescate, bajo amenaza de ser quemado junto a la imagen de no hacerse así.

            Los Padres Miguel de Jesús, Juan de la Visitación y Martín de la Resurrección se encargaron de las negociaciones acordando y tasando el pago en su peso en oro. Cuantas veces lo pesaron siempre daba el mismo resultado, 30 monedas, al igual que el precio de la traición de Judas. Se comprometieron al pago D. Francisco de Sandoval y Roxas, D. Antonio Correa-Hidalgo, el capitán de infantería D. Domingo Grande de los Coelos y D. Lucas de Zúñiga, y no solo fue para el rescate del Nazareno de Medinaceli sino para otras 16 imágenes más, que fueron trasladadas a Tetuán y posteriormente a Ceuta donde el 28 de enero de 1682[9] fueron recibidas por una gran cantidad de fieles entrando en procesión. Tras los sucesos acaecidos la primera advocación popular que consta es la de Jesús del Rescate.

            La imagen es trasladada a Gibraltar y de ahí a Sevilla para luego llegar a Madrid en agosto de 1682 donde fue entronizada en el convento de los Padres Trinitarios Descalzos. Comienza un periplo propiciado por la invasión Napoleónica, la desamortización de Mendizábal y la Guerra Civil.

            Una vez finalizado este conflicto bélico, el representante del nuevo Gobierno español, consigue que el venerado Cristo de Medinaceli saliera el 10 de mayo de 1939 de Ginebra siendo recibido en la estación de Pozuelo de Alarcón con honores militares, donde la Junta Real de la Esclavitud se hace cargo de El, llevándolo a Madrid, concretamente al monasterio de la Encarnación.

            Este estudio puede consultarse íntegramente en el segundo capítulo del libro M.I.A. COFRADÍA DE LA ESCLAVITUD DE JESÚS NAZARENO, DE ZARAGOZA, 250 AÑOS DE HISTORIA (1759-2009) editado en conmemoración de este aniversario por la Asociación Cultural Redobles.


Pedro José Guillén Labalsa



[1] Jn 19, 5
[2] “Aquí tenéis al hombre”
[3] Jn 19, 14
[4] “Ecce rex vester”
[5] Hay que distinguir entre imagen de vestir que es aquella anatomizada y articulada para ser vestida y la imagen de candelero que solo tiene talladas cabeza, manos y pies, también para ser vestida.
[6] 1610
[7] 1614
[8] Año en el que comienza la construcción de la iglesia barroca de Santa Isabel de Portugal, vulgo San Cayetano.
[9] Muere en Zaragoza Jusepe Martínez, el día 6 de este mes.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Introducción...

En primer lugar es necesario contextualizar la evolución de las distintas disciplinas artísticas, siempre circunscritas al entorno de las Hermandades y Cofradías, especialmente las Penitenciales.

Durante el Cinquecento, se desarrollan las sesiones del Concilio de Trento y concretamente la Sesión XXV principiada el día 3, y acabada en el 4 de diciembre de 1563 sobre la invocación, veneración, y reliquias de los santos, y de las sagradas imágenes, que nos dice:

Manda el santo Concilio a todos los Obispos, y demás personas que tienen el cargo y obligación de enseñar, que instruyan con exactitud a los fieles ante todas cosas, sobre la intercesión e invocación de los santos, honor de las reliquias, y uso legítimo de las imágenes, según la costumbre de la Iglesia Católica y Apostólica,…Además de esto, declara que se deben tener y conservar, principalmente en los templos, las imágenes de Cristo, de la Virgen madre de Dios, y de otros santos, y que se les debe dar el correspondiente honor y veneración…porque el honor que se da a las imágenes, se refiere a los originales representados en ellas; de suerte, que adoremos a Cristo por medio de las imágenes que besamos, y en cuya presencia nos descubrimos y arrodillamos.”

Este espíritu contrarreformista  impulsa la creación de Hermandades y Cofradías en honor a una imagen de Cristo en Su Pasión y Muerte, y por ende, la producción artística, especialmente durante el Barroco.

Dichas circunstancias definen el cómo han llegado las Hermandades y Cofradías a nuestros días, su estética y su relación con el tema sobre el que queremos incidir, las Artes.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Comenzamos esta andadura...

Tal y como dice el título, empieza un nuevo curso académico y cofradiero, en el que quiero compartir con todos vosotros mis inquietudes artísticas referentes a nuestro querido mundo cofrade.

Periódicamente se publicarán artículos, enlaces, entrevistas, colaboraciones, etc. siempre con relación al mundo de las Artes en nuestras Cofradías y Hermandades.

Espero que sea de vuestro agrado
Os saluda vuestro hermano en Cristo.